LENA

24/12/2019

He corrido entre arboles preciosos, he reído, he compartido amor incondicional desde el primer día, he dormido plácidamente, he disfrutado de manjares solo al alcance de privilegiados, he viajado (siempre con la mirada curiosa y el corazón abierto), me he zambullido en ríos, he saltado de alegría, he jugado con piedras, palos, pelotas, muñecos y todo lo que volaba ante mis ojos, he sonreído bajo cascadas y he nadado en lagos de agua cristalina como solo la felicidad interior te puede hacer flotar…

Hoy quiero dar las gracias a todos aquellos que se han cruzado en mi camino y me han dado tanta magia, me despido por un tiempo de todos ellos con la misma elegancia que he tratado de mantener durante todo mi sueño. No estoy triste ni hablo en pasado porque soy de las que creen qué de algún modo, el alma no muere nunca.

Gracias a todos los que me han regalado una caricia, a todos los que me han regalado parte de su tiempo, a todos los que han jugado y han compartido su comida conmigo, gracias a todos los que me han volcado conmigo su amor y me han hecho sentir especial.

Si como decía Einstein “la vida es el sueño” ahora estoy despierta…

Soy consciente de lo guapa que soy incluso ahora en este último día, de lo lista que soy hasta el final y más allá, de lo buena que he tratado, trato y trataré de ser siempre con todos aquellos que lo merecen, hoy he descubierto también lo fuerte que soy hasta el último aliento. He llevado mi enfermedad con entereza y dignidad gracias también a las personas que han estado cerca. Por eso y por tantas cosas emprendo este penúltimo viaje tranquila y en paz.

Estas últimas palabras de agradecimiento están dedicadas a la persona que me ha regalado este sueño absolutamente feliz, una persona que me lo ha dado todo, absolutamente todo. Recuerda que no importa cómo y porque nuestras vidas se cruzaron, lo que importa es que desde el primer momento hubo esa mirada por ambas partes que nos unió para siempre.

Hace 5 años me arrebataste de las garras de una muerte injusta que no merecía y desde entonces me has dado todo tu tiempo y me has regalado todo tu amor. GRACIAS

Dicen que nosotros damos más de lo que recibimos, en mi caso no ha sido exactamente así, he tenido la suerte de tenerte a mi lado, has sido hasta hoy un ángel protector que me lo ha dado todo, tu vida y la mía han ido de la pata durante estos últimos años. Quiero que pienses que eso ha sido una verdadera suerte para las dos, por eso no quiero que estés triste, yo no lo estoy.

He sido tu psicóloga, tu apoyo, tu mejor amiga, incluso podría decir que tu verdadera alma gemela, ahora me toca ser tu ángel de la guarda.
Sé que nunca me olvidaras, y sabes que yo tampoco lo haré, nunca desapareceré, nunca dejare de acompañarte, de protegerte y de correr a tu lado. Siempre tuya.

Fdo: LENA (diosa protectora)