Hoy me siento rota, no hay rincón ni situación que no me recuerde a ti.Te has ido, sin estar preparada para tu marcha y el vacío que has dejado.
Que suerte he tenido de compartir contigo estos maravillosos 13 años.
Me diste amor sin medida, consuelo en mis peores días y alegría en los más simples.
Ares, gracias por enseñarme tanto. Por mostrarme lo que significa amar con el corazón completo. Por mirarme como si yo fuera todo tu mundo. Cuando en verdad tú lo eras para mí.
Corre libre, mi amor. Juega, descansa, duerme al solecito , y de vez en cuando, vuela en mis sueños.
Aquí seguiré yo, aprendiendo a vivir sin tus patitas pero con tu alma pegada a la mía. Porque no importa el tiempo o el espacio: tú siempre serás parte de mí.